viernes, 12 de octubre de 2007

NUEVAS TENDENCIAS DE LA GESTIÓN PORTUARIA INTERNACIONAL



Los Puertos en la actualidad, afortunadamente han dejado de ser un ente apartado de la sociedad, con fines netamente económicos para convertirse en un complejo sistema de desarrollo social sin comparación alguna, que evolucionando en sus conceptos ha incorporado nuevas tendencias dirigidas a la inclusión de altas tecnologías así como al cambio de paradigmas que reemplazan en sí la definición misma de un Puerto, colocándolo en el mercado global como grandes núcleos económicos donde se producen grandes actividades de todo tipo (comercio exterior, servicios a los cruceros turísticos, incorporación de nuevas funciones terciarias, actividades logísticas, seguro y finanzas) y como un gran polígono industrial directamente relacionado con las exigencias del mercado.

En la antigüedad, el concepto de puerto estaba escasamente limitado a “sitios de refugio o lugar abrigado, del viento y las corrientes, para los buques”, es decir, lugares donde el buque en condiciones de seguridad descargaba sus mercancías y reaprovisionaba con el fin de continuar la travesía pautada, así como realizar las reparaciones a la nave en caso de ser necesarias.

Mientras esto ocurría, los puertos en su parte externa eran, sin lugar a dudas, un antro de cualquier cantidad de vicios y roedores, lo cual lógicamente desbordaba una serie de comentarios que destruían la imagen del recinto.

La dirección de los puertos, como lo podemos ver en la historia marítima, era ejercida o por marinos o por pobladores de la zona relacionados con los ayuntamientos, los gobiernos o la actividad pesquera.

Hoy día, definir un puerto solo como un sitio de refugio a los buques es, no solo una muestra de una profunda falta de actualización sobre el tema, sino también una desventaja competitiva, que coloca al país en una precaria situación ante un mundo que se globaliza a toda velocidad, o como decimos los marinos “a toda máquina”.

Mi opinión personal y académica acerca de la globalización, la defino como un fenómeno de desarrollo y unidad que avanza a grandes pasos, dejando atrás a quien no se le une, y a una distancia que en segundos se convierte en abismal.

Con el correr del tiempo, se puede decir que uno de los sectores que más ha evolucionado ha sido el marítimo-portuario, y por supuesto todos los conceptos que de ellos se derivan han cambiado en su totalidad, y esto ha sido a mi manera de ver, positivo y funcionalmente aplicable a los criterios de negocios de países del tercer mundo.
La educación de alto nivel en materia portuaria, es sin dudas la puerta de entrada en un nuevo sistema mundial de gestión para lograr que de las aulas, salga el desarrollo de los países que no se encuentran en mejores condiciones.

La Formación en Gestión Portuaria debe ir relacionada directamente con esas nuevas tendencias, y su aplicabilidad en los puertos de los países en vías de desarrollo, los cuales en la actualidad se encuentran en un conflicto legal debido a la discrepancia entre la descentralización iniciada en la década de los 90´s ,y la nuevas leyes generales de puertos, y cuyo conflicto parece frenar un poco el desarrollo de los mismos.

En este orden de ideas es bueno recordar el fenómeno generacional ocurrido en la década de los años noventa, cuando los puertos europeos e iberoamericanos experimentaron grandes cambios en la forma de gestión y explotación de sus infraestructuras, en muchos casos pasando de públicos a privados, en otros descentralizándose y traspasada a administraciones territoriales (estados, provincias, regiones, municipios o ciudades, según la denominación de cada país) y también se experimentaron cambios en la gestión y financiación, aumentando la presencia del sector privado en la prestación de servicios y en las terminales especializadas, que hacen vida en los Puertos.

Concluyo esta publicación diciendo que todos los grandes y medianos puertos del mundo que pretenden o aspiran a un desarrollo sostenible de sus tráficos, actividades e infraestructuras se deben plantear como objetivos:

1. Mejorar la eficiencia operativa.
2. Captar nuevos tráficos.
3. Mejorar las relaciones con la ciudad con nuevos servicios terciarios.
4. Promocionar modernas actividades logísticas.

Todo ello con un desarrollo de infraestructuras compatible con el medio que rodea al puerto: Las ciudades.
Que este nuevo pensamiento global, comience a divulgar todo lo que los marítimos y portuarios tenemos que aportar al desarrollo de los países menos favorecidos...

Seguimos en contacto!


Jesús E. Martínez.